Jánuca (חֲנֻכָּה, y sin puntuación diacrítica חנוכה), llamada "la Fiesta de las Luminarias", es una festividad judía que se celebra por ocho días, y en la que se celebra la derrota de los helenos y la recuperación de la independencia judía a manos de los macabeos, y la posterior purificación del Templo de Jerusalén de los iconos paganos, del que se recuerda el milagro del candelabro, que ardió por ocho días consecutivos con una exigua cantidad de aceite
Historia y tradición
La festividad de Jánuca evoca la época de la hegemonía helénica en Israel, iniciada con la conquista de Alejandro Magno, en el año 332 adC; y como tal, no se hace mención a ella en las Escrituras. Cuando se corona como rey de Siria a Antíoco IV Epífanes (175 y 164 adC), éste decide helenizar al pueblo de Israel, prohibiéndole así a los judíos poder seguir sus tradiciones y costumbres. Un grupo de judíos conocido como los macabeos, provenientes de la zona de Modi'ín, comenzaron a rebelarse contra los soldados griegos, ya que se negaban a hacer actos que iban en contra de su propia religión. Tuvieron una lucha difícil, y eran una minoría luchando contra el ejército griego, sin embargo sus estrategias, su decisión y fe les llevaron a lo que es el milagro de Jánuca, ganar pocos contra muchos. Cuando terminan la guerra, los macabeos regresan a Jerusalén a las sinagogas y las encuentran destruidas, ellos encuentran la menorá (un candelabro de siete brazos) apagado, y aceite para encenderlo un sólo día. Tardaron ocho días en tener listo más aceite y sin embargo ese poquito aceite que tenían mantuvo prendido la menorá durante los ocho días hasta que tuvieron más aceite.
Celebración
La fiesta de Jánuca se celebra durante ocho días, del 25 de kislev al 2 de tevet (o el 3 de tevet, cuando kislev cuenta con sólo 29 días). Durante esta festividad se prende una januquiá o candelabro de ocho brazos (más uno mayor). En la primera noche únicamente se prende el brazo mayor y una vela, y cada noche se va aumentando una vela, hasta el último día en el que todo el candelabro se enciende completo. Este hecho conmemora el milagro de que el aceite duró ocho días.
Es costumbre que los niños jueguen con un sevivon o pirinola. Este pirinola de Jánuca tiene cuatro caras, cada una de ellas con una letra en hebreo:
נ ("Nun")
ג ("Guímel")
ה ("He")
ש ("Shin") (en Israel: פ "Pe")
Las cuatro letras son las siglas de "Nes gadol halla sham" (en Israel: "Nes gadol halla po"), lo cual se traduce a Un gran milagro ocurrió allá (acá).
También se acostumbra comer levivot y sufganiot, tortas de papa y bolitas de masa rellenas de mermelada.