Según narra la historia, durante el siglo II a.C. los Sirios-Griegos pretendían tomar el templo de Jerusalén para adorar a sus dioses. Los judíos no permitirían tal acción y por ello, decidieron unirse para combatir en su contra. Una guerra definida en la historia como “de pocos contra muchos” tuvo sus logros para los hebreos, quienes le ganaron a los Sirios y así protegieron su santuario.
Hubo un hombre que junto a sus hijos fue líder en esta rebelión. Su nombre era Matitiau y era sacerdote.
Una vez lograron entrar al templo, cuenta la historia que el grupo encontró aceite suficiente para mantener una llama encendida por un día; sin embargo, milagrosamente la luz logró estar encendida por ochos días.
De allí nace la celebración llamada Hanukkah también conocida como Jánuca, que en hebreo significa dedicación, aunque otros lo relacionan con la palabra inauguración. Lo importante para los judíos no es sólo la victoria en este encuentro y la reapertura del templo, sino el milagro ocurrido allí una vez que pudieron entrar en él nuevamente.
El significado de esta fiesta para los hebreos se vincula a las minorías que desean preservar su integridad contra las presiones sociales y políticas. La festividad se inicia el día 25 del mes judío llamado Kislev y dura ocho días.
Una de las figuras características del Hanukkah es el Menorá, o candelabro de nueve brazos. Es necesario aclarar que para esta celebración se utiliza de nueve brazos y no de siete como es tradicional para la religión judía, pues éste último sólo puede ser usado, según el Torá, dentro del templo.
Cada noche, durante el tiempo de Jánuca se enciende una vela allí, ésta debe prenderse luego de la aparición de las primeras estrellas o unos 40 minutos luego de la puesta de sol, y deben estar encendidas por lo menos media hora luego del anochecer.
La primera vela que debe encenderse es la que se encuentra al extremo derecho. El segundo día, se prenderán dos velas y así sucesivamente, hasta culminar las ocho. Cada noche se iluminará la que se encuentra al lado izquierdo de la que fue encendida la noche anterior. Las velas deben estar colocadas en línea recta y todas deben tener la misma altura. El Menorá debe estar ubicado en un lugar visible del hogar.
Otra de las costumbres que acompaña al Hanukkah es la narración de los hechos ocurridos en esos días por los antepasados hebreos. La caridad es especial en estas fechas, pues las familias buscan ayudar a los menos favorecidos económicamente.
Igualmente, las familias suelen realizar otras actividades como intercambios de regalos, decoración del hogar y elaboración de comidas especiales.
Los niños reciben dinero y se entretienen con un juego llamado dreidel, una perinola formada en la parte superior por un cubo que posee una letra en cada cara: N, G, H y S. Según la página web serjudio.com, cada una tiene un significado: Nes, Gadol, Haia, Sham, en español: milagro, grande, hubo, allá; esto en referencia a lo ocurrido en el templo con el aceite y la luz. Algunos expertos en la cultura hebrea, señalan que este cubo también se vincula con los imperios que dominaron Israel.
Algunas costumbres
Según la página www.serjudio.com, hay algunas reglas tradicionales que deben ser tomadas en cuenta en tiempo de Hanukkah. A continuación un resumen de las mismas:
• El día anterior y siguiente de Jánuca se permite ayunar.
• Está permitido el trabajo en este tiempo.
• Se recomienda el aceite de oliva para encender el Menorá.
• Se recomienda usar un candelabro de plata o de algún metal precioso.
• Se recomienda que las luces se enciendan cerca de la entrada del hogar o cerca de una ventana.
• Las velas deben encenderse al momento en el que las primeras estrellas aparecen en el cielo. Se debe recitar la oración del anochecer antes de prenderla.
• En la primera noche se deben decir tres bendiciones: Sheasa nisim, Vetsivanu lehadlik ner shel Jánuca y Sehejeianu.
• Las velas deben estar encendidas por lo menos por media hora. No se puede utilizar la luz de éstas.
• Si la mujer de la casa enciende la vela, los demás miembros de la familia no tendrán que hacerlo.
• Si un hombre ciego desea participar, puede hacerlo pagándole a alguien una moneda para que lo ayude. Si es casado, su esposa debe ayudarlo.
• En el Shabbat, las velas que deben ser encendidas primero son las de Jánuca.
• El día sábado, las velas de Jánuca deben ser encendidas luego de la ceremonia de havdala.
• El aceite sobrante del Jánuca y las mechas deben ser quemadas.
• Durante la fiesta de Jánuca se debe recitar el Halel entero.
• Se suele buscar a tres hombres para que lean parte del Torá.